Manuel Bea

Manuel Bea .Comienza su aprendizaje en la Escuela de Artes Aplicadas y Oficios Artísticos de Barcelona. En 1958, fija su residencia en Suiza, donde entra en contacto con los grupos postsurrealistas. Permanece en Zurich hasta 1962, fecha en la que regresa a la ciudad condal, entrando a formar parte de la escena artística barcelonesa con una obra a medio camino entre el informalismo y la nueva figuración. En sus telas se entremezclan la herencia del movimiento bretoniano con un tratamiento matérico al modo de Fautrier y Dubuffet; no en vano se le relaciona en sus inicios con Dau al Set. A partir de 1965, y durante la década de 1970, su estilo evoluciona hacia una mayor figuración,definida por la aparición de motivos surrealizantes que flotan en un espacio difuso. La obra de Max Ernst, artista a quien admira desde la época en la que reside en Suiza, tiene una influencia decisiva en su trabajo. En 1979 Bea se traslada a la Costa Brava, donde, a partir de 1982, trabaja en obras tridimensionales con poliéster, materiales tecnológicos y objetos de deshecho, como sus Experiencias con metacrilato (1983). Todo ello sin abandonar nunca la vertiente gráfica, iniciada a los catorce años con su ingreso en un taller de ilustración, que se plasma en diversas carpetas de grabados y litografía